Peregrinos de Panguipulli participaron en la culminación diocesana del Jubileo 2025 en Villarrica

Siete buses llenos y numerosos peregrinos en vehículos particulares viajaron desde Panguipulli para unirse al gran Encuentro Jubilar en el Parque Municipal de Villarrica. La celebración, presidida por el Nuncio Apostólico, convocó a toda la diócesis en un ambiente de fe, alegría y fraternidad.

El Parque Municipal de Villarrica se transformó este domingo en el “Campo Jubilar” o “Campo de la Esperanza”, donde los cinco decanatos de la Diócesis de Villarrica se reunieron para vivir la culminación diocesana del Jubileo 2025. Cientos de fieles participaron de esta jornada de oración, música, fraternidad y celebración de la Eucaristía.

Desde la Parroquia San Sebastián de Panguipulli, siete buses llenos de peregrinos —junto a muchos que viajaron en vehículos particulares— partieron desde la Plaza de la ciudad alrededor de las 7 de la mañana, para llegar antes de las 9 al gran encuentro diocesano.

Los peregrinos de Panguipulli, al igual que todo el decanato sur, fueron identificados con el color rojo, sumándose al ambiente festivo de toda la diócesis.

Durante la jornada, los asistentes rezaron, cantaron, bailaron, adoraron y celebraron la Santa Misa, compartiendo un profundo sentido de fraternidad y familia diocesana. La animación del evento estuvo a cargo de tres motivadores: Cecilia Rainqueo, feligresa de Panguipulli, quien condujo el encuentro junto a los sacerdotes Cristian Rivera (Lican Ray) y Erwin Sanhueza (Lanco).

Asimismo, músicos del coro juvenil parroquial integraron el coro diocesano encargado de acompañar distintos momentos de oración, como el rezo del Rosario y la Adoración al Santísimo.

Un momento especialmente significativo fue la apertura del encuentro: el vicario general de la diócesis y párroco de Panguipulli, padre Andrés Maricán, presidió el rito inicial en el que el Obispo de Villarrica llevó en procesión la Cruz Jubilar hasta el altar.

Más tarde, el padre Andrés concelebró la Eucaristía junto al Obispo, en una misa presidida por el Nuncio Apostólico de Su Santidad, Mons. Kurian Matthew Vayalunkal, acompañado por todos los sacerdotes y diáconos de la diócesis.

A pesar del intenso sol y las altas temperaturas, la alegría y el amor a Cristo marcaron toda la jornada, vivida como una verdadera fiesta de fe. En su homilía, el Nuncio invitó a todos a permanecer unidos a Cristo, mientras que el Obispo alentó a realizar una obra de misericordia concreta, visitando a alguien que necesite la esperanza del Señor: un enfermo, un anciano o alguien que atraviese un momento difícil.

Al concluir el encuentro, se impartió la bendición papal, y todos los fieles que cumplan las condiciones correspondientes (confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Santo Padre) pudieron recibir la Indulgencia Plenaria.

El Jubileo no culmina aún: su clausura oficial será el 28 de diciembre en la Catedral de Villarrica, mismo día en que se celebrará la Santa Misa de ordenación presbiteral de los diáconos en tránsito Marcelo Lira y Didier Alzate.